Porque enseñar a patinar a un niño nunca será lo mismo que enseñar a un adulto, las clases para los más pequeños se realizan totalmente aparte de las de los adultos y se basan en multitud de ejercicios que combinan juego y aprendizaje.

Por supuesto, nuestros monitores cuentan con una larga experiencia en el trato infantil y se sirven de técnicas psicopedagógicas más que probadas para fomentar las aptitudes de los niños.

Además, los niños estarán en grupos reducidos y los padres podrán estar tranquilos ya que todos nuestros profesores cuentan con el certificado de penales, tal como obliga la ley.